Cuándo entrar, cuándo salir. Una temporada en los mercados volátiles

Cada vez que invertís, asumís un riesgo para obtener una rentabilidad. Las inversiones financieras, por definición, están expuestas a varios tipos de riesgos, más o menos previsibles o controlables en su impacto en la “apuesta”.

El mundo es cada vez más complejo y, por supuesto, la Argentina presenta varias particularidades que obligan a extremar el estudio y la astucia. No por nada el “riesgo país” de la Argentina es infinitamente superior al del resto de los países parecidos al nuestro.

Sin embargo, en este nuevo artículo de Liebre Capital te acercamos información referida a las oportunidades para obtener rentabilidad con los fondos que decidamos poner a trabajar en el mercado financiero.

Una muestra de lo que hablamos, tanto de los riesgos como de las oportunidades que presentan las inversiones en nuestro país lo refleja el gráfico que publicamos a continuación, que corresponde al índice S&P Merval que marca la evolución de las principales acciones argentinas que cotizan en los mercados de valores del país.

En tres meses, entre noviembre y enero, el índice, es decir, el valor indicativo de las principales acciones, subió aproximadamente 40%. Solamente en enero, el S&P Merval aumentó 25%. Pero, en marzo, el índice de las principales acciones de empresas argentinas volvió de los máximos históricos a los valores de enero, un 25% menos.

Claro que en noviembre, cuando el índice estaba en 15000 puntos aproximadamente, si comprabas acciones y las mantenías hasta enero, hubieras obtenido una ganancia extraordinaria de 45%. Pero cuando en enero las acciones estaban en un “rally”, si comprabas en ese momento, con el índice a 26.000, en la actualidad, a 20.000 puntos, hubieras perdido 20% de tu inversión.

Por eso nos preguntamos cómo actuar en las inversiones, cuándo entrar, cuándo salir. Lo primero que te sugerimos desde Liebre Capital, es contar con información sobre lo que sucede con las acciones de las empresas, el contexto global, las decisiones en la economía del país que pueden influir en el valor de las acciones. Estar actualizado tiene muchísimo valor.

Pero también, como tu capital es muy importante, lo que deberías hacer es consultar a los especialistas. Acá en Liebre tenemos a los mejores asesores de inversiones de la plaza, además de una espectacular plataforma tecnológica para sacarle el jugo a tus inversiones.

Objetivos y estrategia

Una vez que sepas cuánto de tus recursos vas a utilizar, tenés que tener claro para qué querés ese dinero. Un objetivo en concreto. ¿Querés tener rentabilidad y estás dispuesto a aguantar en el tiempo o preferís buscar cómo ganar rápido? Por ejemplo, podés comprar una acción o un Cedear, apuntando a mantenerlo a largo plazo esperando la valorización de esa empresa, sus resultados, su cotización de mercado.

Pero también existe otra alternativa, que es la del trading. O lo que es lo mismo, aprovechar las oscilaciones de las cotizaciones en períodos cortos o extremadamente breves. Puede ser cuestión de semanas, días, incluso horas.

Hay una tercera opción, que es buscar una renta que se abone periódicamente, por ejemplo si invertís en renta fija. El mayor exponente es la inversión en bonos soberanos (letras del tesoro) o de empresas (Obligaciones Negociables, ON) o fondos de inversión que contengan en cartera estas colocaciones. En este caso, la ganancia será más estable por el cobro de rentas ya programadas. Además, está el valor del activo mismo, cuya cotización se mueve permanentemente.

La Bolsa

Los especialistas nos dan una mirada sobre las inversiones en activos de renta variable, como son las acciones de empresas. Las empresas cotizantes tienen dos vertientes. El valor de la acción, que está sujeto a los resultados y crecimiento potencial de la actividad de la firma en un tiempo dado y también a los dividendos –ganancias- que distribuya la empresa.

Hay riesgos de perder valor, por lo cual hay que estar atentos no solo a la evolución de la cartera de activos que estructuremos sino al contexto y a los condicionantes (consumo, acceso a materia primas, entorno regulatorio) para esa empresa. Eso será indicativo de sus resultados futuros. Pero también hay que tener una predisposición particular. Saber qué límite de tus recursos destinar a esta inversión.

Sin embargo, los mejores resultados aparecen cuando desarrollas habilidades de ir “contra la corriente”. Hay quienes dicen que cuando todo el mundo compra, ya es tarde para comprar. Hay que estar atentos a aquellos activos –acciones, ADR, Cedear, incluso bonos de deuda- que todo el mundo vende y que tocan precios técnicos muy bajos.

Si logras ubicar las acciones u otros activos baratos alineados con tu estrategia temporal -cuando podes esperar la recuperación-, tenes posibilidades de crecer en un contexto posible aunque no evidente. Allí anidan las mejores oportunidades.

Esto sucedió con quienes compraron bonos de la deuda argentina en dólares en noviembre de 2022 y lograron casi duplicar su inversión en cuatro meses hasta principios de 2023. Lo mejor siempre es tener un buen asesoramiento, no dejarte llevar por tus impulsos, medir la inversión que estás dispuesto a realizar, saber cuándo vender para no perder de más. Estar informado es la mejor alternativa.

Lo mejor, es consultar con los que más saben. En Liebre te estamos esperando.